Saturday, October 30, 2004

Tache lo que no proceda

El tiempo que se queda corto (estrecho) (fino) (delgado) (angosto) para poder pasar a través (por encima) (por debajo) (junto) (al lado) (cerca) de él. El tiempo que evita (esquiva) (elude) (regatea) (salta) (dribla) (zafa) al reloj.
El tiempo que pasa (transurre) (sigue su ritmo) (acelera) (se desmiga) para demostrarnos (explicarnos) (aclararnos) (mofarse) (jodernos) que él es quien manda (el rey) (el jefe) (el aznar de turno) (el boss) (el mandamás) (el chulito de playa) y nosotros no podemos (somos incapaces) (somos nulos) (somos lo suficientemente ineptos) como para negarnos (impedirlo) (pararle) (frenar sus movimientos) (darle una buena patada en los cojones para que no siga avanzando).

El tiempo lleva la batuta. Y él mismo tacha nuestras opciones. El mismo elige qué palabras utilizar para, al fin y al cabo, siempre entender lo mismo: que apenas tenemos tiempo.